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Autoridades debaten sobre insuficiencia presupuestaria
El Consejo Universitario (CU-UCV) debatió sobre las consecuencias que tendrá para la universidad el que sólo se haya otorgado el 39% de los recursos solicitados para el 2015, lo que obligará a seguir cubriendo las insuficiencias a lo largo de año mediante créditos adicionales, en el marco de una economía altamente inflacionaria.
Bernardo Méndez, Vicerrector Administrativo UCV/ Yolanda Osorio, Decana de Odontología/ Baldo Alesi, Representante del Ministro ante CU
Luego de aprobar “bajo protesta” la asignación presupuestaria para el ejercicio fiscal 2015, los integrantes del cuerpo universitario manifestaron sus inquietudes ante una situación que, aunque ha sido “reiterada en lo últimos 8 años”, consideran que en este momento se ve agravada dado el alto índice inflacionario y las sucesivas devaluaciones de la moneda nacional.
El Vicerrector Administrativo, Bernardo Méndez, expuso que existe una intencionalidad por parte del Ejecutivo hacia las universidades que no comparten la ideología del gobierno, a las cuales se busca controlar a través del manejo presupuestario, el cual se otorga con insuficiencias para luego cubrir el déficit con créditos adicionales.
“La asignación presupuestaria no es una concesión, es una respuesta a lo que necesita el país. Como ejemplo, tenemos una lista de proyectos de investigación de vital importancia para cuya ejecución no hay dinero porque el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico tiene el mismo dozavo desde el 2008 , y aunque ciertamente a veces los recursos llegan después o por otras vías, ese no es el deber ser.”
El Secretario de la UCV , Amalio Belmonte, expuso la necesidad de cambiar esta práctica de los créditos adicionales, que luego es manejada para argumentar que se entregan los recursos necesarios a las universidades, sin aclarar que se obliga a las universidades a funcionar sin una debida planificación presupuestaria.
“En este momento esta práctica puede tener incidencias impredecibles en el funcionamiento de la universidad, al estar aunada al elevado y cambiante nivel inflacionario del país.”
El déficit en la actual coyuntura económica
Ante el panorama económico venezolano, una de las principales preocupaciones de los miembros del CU es el hecho de que en el presupuesto nuevamente no se contemplen los gastos para funcionamiento e infraestructura, lo que aumenta las limitaciones para la adquisición de materiales, insumos, equipos y para el mantenimiento de los espacios de clase, investigación y extensión.
La profesora Inírida Rodríguez, del Vicerrectorado Académico, manifestó su preocupación por la incidencias en la academia. “Tenemos datos y cifras que ya indican cómo una serie de programas académicos se están viendo afectados en su funcionamiento”.
El investigador y representante profesoral ante CU, Alberto Fernández, luego de calificar como una manipulación la entrega de recursos vía créditos adicionales, mencionó las dificultades que se presentan para financiar proyectos e incluso para desarrollar actividades básicas, como las clases.
“Los estudiantes cofinancian sus estudios, pues deben comprar materiales e insumos de laboratorio, y hasta las hojas de exámenes. En ocasiones se sustituyen sustancias e insumos por materiales que se llevan a los laboratorios desde las propias casas. Estas situaciones deben conocerse, pues aunque ya van varios años con déficit, desde afuera se observa que la universidad sigue funcionando, pero no se explica cómo se está haciendo para que siga operativa.”
La Decana de Odontología, Yolanda Osorio, dio como ejemplo el hecho de que en el 2009 para la remodelación de la Sala Clínica de la Facultad se invirtieran 534 mil bolívares, monto que a la fecha fue superado solamente en la reparación de una cuantas unidades de esa Sala, labor que requirió en el año 2014 de 200 mil bolívares.
“Esto es una muestra de cómo la inflación incide en el presupuesto, por eso considero que esta asignación para el 2015 es peor que la del 2014. Tomando en cuenta que cada facultad dispone del mismo monto de dinero desde hace casi ocho años, parece que no se considera o no importa ni la inflación ni las sucesivas devaluaciones ocurridas en el país.”
Por su parte, el profesor Miguel Alfonzo, representante profesoral ante el CU alegó estar de acuerdo con que la situación es difícil, pero piensa que hace falta una visión más integral del problema.
“No niego que los presupuestos que se han aprobado desde la cuarta y quinta república son deficitarios, pero hay temas que no se mencionan y que permiten un análisis más completo del problema presupuestario, entre ellos el de los ingresos propios, cuyos montos permiten adquirir equipos y financiar muchos proyectos.”
El profesor Alfonzo expresó que en la asignación presupuestaria de los últimos años ha estado influyendo el aumento de la matrícula de estudiantes en el país, lo que requiere dinero, agregando que también hay que tomar en cuenta la reciente baja de los precios del petróleo.
“La torta debe repartirse ahora entre más estudiantes; se trata de 2 millones 700 mil personas ejerciendo su derecho a la educación.”
“En cuanto a los insumos para las prácticas, hay materiales que no se sustituyen todo el tiempo. No se tienen que comprar pipetas o tubos de ensayo cada trimestre o semestre, por ejemplo.”
Recordó que la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU) posee partidas para gastos de infraestructura y que puede acudirse a este organismo para solicitar recursos en este rubro.
El representante del Ministro de Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, Baldo Alesi, recordó que desde los años 80 la UCV ha estado aprobando presupuestos bajo protesta.
“Creo que es una mala praxis de los gobiernos que debemos pedir sea cambiada. Voy a elevar ante el Ministerio estas inquietudes y observaciones. Es un problema de años y de todas las universidades, y debemos trabajar para que no se siga con esta práctica.”
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